2005/09/15

Turbay contaba con 89 años

"En el momento de su muerte, el presidente Turbay contaba con 89 años"
Refiriéndose a la edad, debe decirse “contaba 89 años”, sin utilizar la preposición con.
En cambio, "contar con", se emplea para significar que se tiene en cuenta a una persona o cosa como elemento cuya acción es necesaria para el logro de lo que se pretende:
Cuenta con el dinero que me pediste
Cuenta conmigo para el trabajo
El cuenta con una herramienta muy útil.

Déle lo mejor a sus hijos

Para respetar la concordancia con el plural hijos, lo correcto es “déles”:
“Déles
lo mejor a sus hijos
Por la misma razón debe decirse “Yo no les tengo miedo a los perros”

Desde ya empezamos a trabajar

Con demasiada frecuencia se utiliza la expresión "desde ya" en lugar de "desde ahora", o "desde este momento". En el caso expuesto, lo correcto es “Desde ahora empezamos a trabajar”

Chaquetas en cuero

En los avisos publicitarios es común ver letreros como “Artículos en cuero” “muebles en madera”, “pantalones en gabardina”. No hay razón para que la preposición en remplace a de cuando se quiere indicar el material de que está hecha una cosa.
Lo correcto es "artículos de cuero", “muebles de madera”, "pantalones de gabardina".

2005/09/04

Prever, proveer y "preveer"

Producto de la confusión por desconocimiento de léxico, en el idioma español se crean a veces términos , incorrectamente construidos por analogía; es decir, por semejanza formal entre elementos lingüísticos que desempeñan o tienen entre sí alguna coincidencia significativa.
Ocurre con cualquiera de los elementos de la lengua: adjetivos, adverbios, verbos...

El caso de prever, y proveer es muy habitual. Prever significa «ver con anticipación» y proveer, «preparar, reunir las cosas necesarias para un fin» o «suministrar o facilitar lo necesario o conveniente para un fin».
Ambos verbos tienen un participio irregular: previsto y provisto, aunque éste último también tiene uno regular, proveído, que se usa normalmente en la conjugación: Se ha proveído (o provisto) de víveres a los desplazados.

Pues bien, en ocasiones el hablante confunde estos dos verbos: utiliza la conjugación del inexistente preveer para referirse al verbo prever: Preveemos que vendrán solo diez invitados; El meteorólogo preveyó tormenta en el norte de la isla; O incluso utilizado como forma no personal: Debimos preveer que eso sucedería.
La mejor manera de no tener dudas es recordar que el verbo "preveer" no existe, y que prever está formado por el prefijo pre-, que indica anterioridad, y ver. Y se conjuga como ver. Prever significa ver algo con la imaginación, imaginarlo antes de que suceda, es decir: ver con antelación.

Él no vio con antelación las dificultades.
Él no previó las dificultades.

Es muy difícil ver con antelación cuál va a ser nuestro consumo.
Es muy difícil prever cuál va a ser nuestro consumo.

Accesible, asequible y "accequible"

"Accequible" es otra de esas palabras inexistentes, resultado de un cruce entre dos que si figuran en el Diccionario de la Real Academia Española, DRAE: asequible, que se puede conseguir, y accesible de fácil acceso.
Pero como ocurre con estas incorrecciones, muchos suponen que si las utiliza un periodista de un noticiero de televisión, debe ser correcta, y en poco tiempo están en boca de todos.

Donde, A donde, Adonde, Adónde

Donde. Es un adverbio de lugar que significa “en un lugar determinado, sitio de permanencia o de reposo”; v. gr. “Vengo de donde el médico”, “¿Dónde estuviste ayer?”, “Encontraron a Juan donde su amiga”. En ninguno de los ejemplos citados se debe anteponer la preposición a. Sería erróneo. También donde tiene la acepción de lo cual; se emplea en razonamientos, en lenguaje dialéctico: “De donde se infiere...”, “De donde se colige o se deduce...”
Asimismo, tiene el sentido general de en un lugar cualquiera: “Por doquiera donde vaya...” Se cometería barbarismo al decir: “Por doquiera que yo vaya”, en que “donde” se sustituye por “que”. Igualmente habría barbarismo cuando se reemplaza por “como”: “¿Dónde me iba a imaginar que te casarías?, por ¿Cómo me iba a imaginar...
Adonde. Es un adverbio relativo y, por tanto, hace referencia a un lugar del que se ha hablado con anterioridad (y que cumple la función de antecedente). Además, el adverbio indica claramente dirección hacia ese lugar. Lo vemos, por ejemplo, en la siguiente frase: “El Teatro Usaquén es adonde iremos mañana”, en esta frase la función de antecedente la cumpliría “El Teatro Usaquén” que es la palabra a la que nos referimos.
A donde. En el caso de que no tengamos un antecedente explícito en la frase usaremos, preferiblemente, la forma separada de este adverbio. Sería, por ejemplo, el caso de la siguiente frase: “Pedro puede ir a donde quiera, no necesita permisos”. Aquí podríamos matizar que en esos casos sería preferible usar la forma separada, no obstante tampoco incurriríamos en un error grave si usásemos en la anterior la forma no separada “adonde”.
Adónde. Con tilde “adónde” funciona como adverbio exclamativo o interrogativo. Puede aparecer en las interrogativas directas, por ejemplo, “¿Adónde vas, Juan?” o en las interrogativas indirectas, “Me gustaría saber o dime adónde vas a ir, Juan”

Porque, por que, porqué, por qué

Porque, sin acento y todo junto, funciona como conjunción causal, y marca una relación causa-efecto. De alguna manera respondemos a una pregunta explícita o implícita. Este uso lo encontramos en la siguiente frase por ejemplo: “Soy así porque me gusta”.
Por que, sin acento y separado, responde a la combinación de la preposición “por” y el relativo “que” que a su vez se corresponde con “por el cual, por la cual, por los cuales, por las cuales”. Lo vemos, por ejemplo, en la siguiente frase: “El motivo por que llegué tarde fue el paro de trenes”. También aparece a menudo después de algunos verbos que rigen “por” como “rezar”, “brindar”, “rogar” y otros, es el caso de “Brindo por que te vaya bien”, por ejemplo.
Porqué, junto y con tilde, es un nombre masculino que significa “causa, motivo o razón”, con este uso lo vemos en la siguiente frase: “Quiero saber el porqué de tu comportamiento”. Aquí debemos tener en cuenta que al ser un sustantivo podemos verlo o ponerlo también en plural y así tendríamos una frase como la que sigue: “Quiero saber los porqués de tu comportamiento”.
Por qué, separado y con tilde, está compuesto por la preposición “por” y el pronombre interrogativo y exclamativo “qué” y su uso se corresponde con la interrogación directa o indirecta: “¿Por qué eres así?”, o "Me gustaría saber por qué eres así".

Acerbo /acervo

Debido a su idéntica pronunciación, estas dos palabras pueden a veces llevarnos a confusión. Pero la verdad es que no tienen nada que ver la una con la otra, ya que "acerbo" es un adjetivo que significa "áspero al gusto, o riguroso, cruel, intenso, desapacible" como sería el caso del siguiente ejemplo: "recibió una crítica acerba por parte de los medios de comunicación"; y, por el contrario, "acervo" tiene el significado de "un montón de cosas o conjunto de bienes materiales o espirituales poseídos por un grupo", un ejemplo de este último caso sería el siguiente: "Sus obras contribuyeron a enriquecer nuestro acervo cultural".

Bajo ese punto de vista

No debemos utilizar esta expresión, lo aconsejable y recomendable es que digamos “desde ese punto de vista” o “desde o a través de esta óptica”.